A $ 4.362,4 millones ascendieron las remesas que enviaron los ecuatorianos desde el exterior en el 2021. Se trató de una cifra récord que supera en más de $ 1.000 millones a las remesas recibidas en 2020 y en 2019.
Es que de acuerdo con las cifras de la balanza de pagos publicada por el Banco Central del Ecuador, en 2020 las remesas fueron de $ 3.337 millones, y en 2019 estas se habían colocado en $ 3.234 millones, es decir, levemente por debajo de las del 2020.
En el 2021, trabajadores extranjeros que residen en el país también enviaron remesas al exterior desde el Ecuador, por $ 595,1 millones. Esta cifra es un poco más alta que la registrada en 2020, que fue de $ 507 millones. También es importante apuntar que en 2019 las remesas llegaron a $ 639,2 millones.
Sobre el tema de remesas, Marcos López, exmiembro del Directorio del Banco Central, consideró que existen dos factores que se ha juntado para lograr la cifra récord en el 2021. En primera instancia, el 2020 fue un año muy complejo por todo el problema del COVID, lo cual contrajo la economía y por eso se vio prácticamente un crecimiento nulo de las remesas con respecto al 2019. Adicionalmente, en el 2021 ya hubo una mayor reactivación económica a nivel mundial. En 2021 se obtuvo la vacuna y se comenzaron a abrir los aforos en distintos negocios. Aseguró que, por ejemplo, en EE. UU. se podía ver una gran demanda de mano de obra, ya que en restaurantes,, cadenas de supermercados, entre otros, se buscaba contratar personal. Lo que sucedía en ese momento era que muchas personas residentes y con beneficios de protección preferían no ir a trabajar para seguir recibiendo los subsidios. Fue entonces cuando la mano de obra de migrantes estuvo dispuesta a los diversos trabajos y por ende pudieron enviar remesas.
De acuerdo con López, los migrantes han sido conscientes de los duros momentos que ha vivido el Ecuador y por ello también mostraron su preocupación por sus familiares, enviando los recursos.
Entre tanto, el Banco Central del Ecuador dijo en marzo que las remesas en el 2021 fueron un factor clave dentro de la recuperación económica del país, sobre todo porque el 4,2 % de crecimiento que tuvo el país se apalancó en el consumo de hogares. Este consumo fue facilitado de manera importante por las remesas del exterior.
Estos análisis coinciden con lo que pasa a nivel de la región. El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) sostuvo que una de las grandes sorpresas que dio la pandemia de COVID-19 fue el crecimiento de las remesas que los migrantes enviaron y todavía envían a sus países de origen. A pesar de la crisis las remesas hacia América Latina y el Caribe no solo se mantuvieron, sino que aumentaron a niveles históricos. Los últimos datos que consolidamos desde el Banco Interamericano de Desarrollo muestran que el envío de remesas hacia América y el Caribe marcó un récord en 2021, alcanzando un total de $ 128.000 millones, su crecimiento más alto en casi 20 años.
La recuperación del empleo en los países de residencia de los migrantes, especialmente el empleo de tiempo completo en Estados Unidos, y la continuidad de algunos apoyos económicos gubernamentales, marcaron durante 2021 una mejora en sus ingresos. Esto permitió durante estos últimos meses de 2021 incrementar el envío de sus remesas para paliar los efectos que subsisten de la pandemia entre sus familiares en los países de origen, dijo el ente multilateral.
Al ser consultado sobre lo que podría suceder en el 2022 con la economía y las remesas, López comentó que las noticias sobre confinamientos de ciudades en Asia por el COVID y la guerra de Rusia contra Ucrania son temas que pueden hacer que el 2022 sea complejo; sin embargo, también comentó que se está regresando a una suerte de normalidad post-COVID en la que ya nos estamos incorporando a los trabajos con más fluidez.