Las licencias ambientales para la producción petrolera del campo Ishpingo, dentro del parque nacional Yasuní, aún no han sido emitidas por el Ministerio del Ambiente, a pesar de haberse solicitado hace cerca de un año.
El pedido hecho por la empresa estatal Petroamazonas fue para el desarrollo de nueve plataformas, de las cuales siete se encuentran en la zona de amortiguamiento y dos están fuera. Ninguna de ellas pone en riesgo la zona intangible del parque Yasuní, aseguró el ministro de Energía y Recursos Naturales no Renovables, Carlos Pérez.
Ishpingo tiene reservas estimadas de 400.000 barriles de petróleo. Dentro de la proforma presupuestaria para 2019, el gobierno consideró la producción de una plataforma en este campo con capacidad de 18.000 barriles diarios, sin embargo la entrega de los permisos limita estas aspiraciones.
“La producción de Ishpingo depende de las licencias ambientales. Tenemos paralizado todo. Estamos esperando licencias para los pozos inyectores pero tampoco se nos ha entregado y eso está causando que no lleguemos a las metas propuestas”, manifestó Pérez durante una visita al Bloque 43 y zonas de influencia del ITT (Ishpingo, Tiputini y Tambococha).
El secretario de Estado reconoció la preocupación del régimen por el represamiento de los trámites en la cartera de Ambiente, pero también por el riesgo que correrían las inversiones. “El compromiso del presidente Lenín Moreno es agilitar esos trámites. Hay riesgo en las inversiones porque si las empresas ven que esto no se destraba, podríamos ahuyentar a los inversionistas”, señaló.
El impacto de no desarrollar Ishpingo perjudicaría al presupuesto del Estado para el siguiente año, por lo que se analizan otras posibilidades para cubrir ese vacío fiscal.
Petroamazonas entregó obras
La comunidad Huiririma (Puerto El Quinche) localizada en la zona de influencia del Bloque 43 ITT, Petroamazonas entregó un sistema de tratamiento y distribución de agua potable.
El gerente de activos de la estatal, Mauro Cárdenas, manifestó que para la compañía esta obra cumple con los compromisos de compensación social.
Esta planta tiene una capacidad para tratar 25.000 metros cúbicos de agua. La inversión fue de $ 865.000 de los cuales $600.000 fueron de Petroamazonas y el resto del gobierno autónomo de Aguarico.
Luis Tangoy, presidente de la comunidad, destacó que el sistema de tratamiento de agua beneficia a 220 personas. Tanto él como el ministro Pérez señalaron que con esta entrega se evidencia la preocupación del Estado para dotar de agua, energía, salud y educación a los habitantes.
“Los convenios de compensación son una muestra de responsabilidad del gobierno y las instituciones públicas en estas zonas”, agregó el Ministro.
En el recorrido, Pérez también verificó la nueva central térmica ITT que tiene un avance del 40% y su objetivo es reducir el consumo de diésel para la explotación petrolera y así optimizar recursos estatales. A finales de enero estaría operativa al 100%.
La central está conformada por 20 unidades de 1,7 mW de operación continua. Para mediados del siguiente año se instalarán otras dos plantas que funcionarán en Cuyabeno.
El gerente de Petroamazonas, Álex Galárraga, dijo que las instalaciones de esta central se ubican fuera del Parque Nacional Yasuní. “De haber seguido funcionando únicamente con diésel se hubieran gastado unos $ 25 millones mensuales”, enfatizó.
El titular de Energía y Recursos no renovables recorrió también la Central de Procesamiento Tiputini (CPT) donde se tratan los fluidos (agua, gas y petróleo) provenientes de los campos Tiputini y Tambococha.
Esta central tiene capacidad de procesar 400.000 barriles de fluidos. Actualmente se procesan 340.000 barriles diarios, de los cuales 64.000 son de petróleo y 270.000 de agua, que es reinyectada en los pozos.
“Esta planta tendrá una ampliación que nos permitirá procesar 1’200.000 barriles para 2021 o 2022”, informó Mauro Cárdenas.
El 80% de la infraestructura de esta área en la cual se han invertido hasta el momento $ 277 millones fue elaborada con industria ecuatoriana.