La Comunidad Andina de Naciones (CAN) aprobó la reducción del flete del valor en aduana para el pago de aranceles en la importación. La medida da legitimidad a una decisión que Ecuador tomó el año pasado cuando en la Ley de Desarrollo Económico, incluyó la reforma con el fin de aliviar la alta carga tributaria que se había originado con el alza inusitada del costo de transporte del comercio exterior, uno de los componentes que se toman en cuenta a la hora de hacer los pagos.
El detalle radicaba en que la norma internacional no estaba acorde con la ley ecuatoriana. Lo que, en su momento, puso en duda la seguridad jurídica con el riesgo de que, lo que Ecuador no cobraba ahora, se podía pedir que se cancele luego.
La norma de la CAN, publicada el 16 de marzo de este año, faculta a los países miembros: Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú, a reducir temporalmente un porcentaje de los gastos de transporte para la determinación del valor en la aduana. Si los precios de los fletes siguen altos, el ahorro anual para Ecuador superaría los 100 millones de dólares, estima Juan Carlos Díaz-Granados, director ejecutivo de la Cámara de Comercio de Guayaquil (CCG), quien sin embargo enfatiza que hacer un cálculo es complejo porque esto depende del tipo de productos y del destino.
La Cámara de Comercio de Guayaquil propuso que el costo del flete no sea parte de la base imponible para pago de aranceles. Esta medida es un alivio para el costo de los productos y permite reducir el impacto en la subida de precios. Así mismo, ayuda en la liquidez para los comerciantes.
Miguel González
presidente de la Cámara de Comercio y Guayaquil
y del
Comité Empresarial Ecuatoriano
Si se toman como ejemplo las importaciones de China, el origen del mayor volumen de compras externas, el ahorro podría alcanzar los $ 79 millones, señaló la Cámara de Industrias de Guayaquil (CIG).
¿Pero este ahorro es significativo? Los representantes de los gremios coinciden en que, en un contexto de alta inflación, la reforma es una ayuda, por ello toman con beneplácito que el ente regional haya acogido finalmente la reforma que ellos venían promoviendo.
Un ejemplo, si el producto cuesta 10, el flete 1 y el seguro 1 el tributo se paga sobre 12; el problema fue que el costo del flete dejó de ser marginal y en algunos casos llegó a costar más que la mercancía y eso provocó que los impuestos se tuvieran que calcular sobre 21. Entonces se decidió sacar al flete de la base imponible, tal como se lo propuso desde el gremio.
Gabriela Uquillas,
asesora aduanera de la Cámara de Comercio de Guayaquil
“Estamos en una coyuntura crítica para la economía de los sectores productivos de todos los países, por el incremento en el precio de los combustibles, por las afectaciones del conflicto entre Rusia y Ucrania, y todo esto influye en el costo del flete. Entonces sí es un alivio el ahorro porque tendrán que pagar menos impuestos”, explicó David López, analista económico.
López agregó que aunque ayuda a mitigar los efectos, no es todavía la solución para todos los problemas que tienen las empresas privadas. Se requiere de un paquete de medidas que tiene que venir desde el Gobierno Nacional, con alianzas e incentivos tributarios.
Vigencia
La norma de la CAN tendrá vigencia hasta el 31 de diciembre de 2023. Se podrá evaluar la prórroga, por única vez, por un año adicional.
Sobre este último punto, el presidente de la Cámara de Comercio de Quito, Carlos Loaiza, enfatizó que el dinero que se ahorrará va a permitir al comercio ser más competitivo y que va a beneficiar incluso al cliente final, porque con el incremento de los fletes y de los impuestos hasta para ellos se encarecieron las compras.
Lo que sí dejan claro los gremios productivos es que en medio de la crisis que se vive, este alivio necesita de más acciones, que esperan recibir mediante la Ley de Inversiones y la próxima reforma laboral.
ANTECEDENTES
• Transporte.- El costo promedio del flete de un contenedor de 40 pies era de 2.000 dólares en 2019, en 2020 subió a 5.000 dólares y para el 2021 sobrepasó los 11.000 dólares, debido a la escasez de contenedores por las secuelas de la pandemia.
• Impuestos.- En 48 meses el costo de los fletes subió más del 500 % y la base imponible para el pago de tributos al comercio exterior era costo, seguro y flete. Entonces, gremios como la Cámara de Comercio y la de Industrias de Guayaquil pidieron que saquen el flete.
• Clientes.- Sin este cambio, por ejemplo, los juguetes de Navidad habrían sido un 30 % más caros. Por lo tanto, el consumidor final también se benefició de que se quite el flete de la base imponible para pagar aranceles.