‘Gasolineros, quebrados’, protesta frente a Carondelet para exigir al Gobierno aumento del margen de utilidad

Distribuidores de gasolina realizaron un plantón para que se ajuste margen de comercialización. Ya se coordina reunión con el Ministerio de Gobierno.

La mañana de este lunes, 8 de julio, unas 400 personas, entre personal de las estaciones de servicio y distribuidores de gasolina, se congregaron en la plaza de la Independencia, frente al Palacio de Carondelet, para exigir el aumento del margen de utilidad por venta de combustible, ya que declaran que están trabajando a pérdida.

Además, solicitan una audiencia con el presidente de la República, Daniel Noboa Azín, y su ministro de Economía, Juan Carlos Vega, y el nuevo titular de Energía, Antonio Goncalves.

Oswaldo Erazo, secretario ejecutivo de los distribuidores de gasolina, informó que desde el Ministerio de Gobierno ya se coordina una reunión para tratar los temas sobre el ajuste del margen de comercialización de las estaciones de servicio. Esperan la fecha y hora de esta audiencia.

Reiteradamente, la Cámara Nacional de Distribuidores de Derivados del Petróleo del Ecuador (Camddepe) ha insistido en que el margen de utilidad de comercialización ha permanecido congelado por 21 años, por lo que tienen que compartir la ganancia de 16 centavos con la comercializadora y los transportistas.

Asimismo, los distribuidores de gasolina manifiestan que ningún Gobierno ha escuchado sus pedidos para reajustar el porcentaje del margen de utilidad y por eso los carteles de la protesta decían: “Gasolineros, quebrados”.

El gremio asegura que la mayoría de las estaciones de servicio está trabajando sobre el punto de equilibrio y a pérdida.

En ese sentido, también solicitan que el precio de venta de los combustibles a nivel nacional no sea uniforme, ellos consideran que dentro de la factura se debería incluir el costo de movilización del flete, que en el caso de provincias donde los centros de distribución se encuentran alejados, el costo de transporte es más alto.

Esto porque los distribuidores de gasolina explican que ellos ahora compran más caro el combustible, por el ajuste de precio a las gasolinas extra y ecopaís a $ 2,722, y siguen ganando los mismos 16 centavos de margen de comercialización, lo que en vez de beneficiarlos los está perjudicando.

Aunque el gremio está a favor de eliminar el subsidio a los combustibles, aseguran que los distribuidores son quienes terminan subsidiando al consumidor el costo de transportar el combustible hacia las estaciones de servicio. (I)

DIARIO EL UNIVERSO