Ecuador y Chile negocian desde el pasado martes 25 de junio de 2019, en Quito, la modernización de su Acuerdo de Complementación Económica (ACE) 65 , que data del 2010.
Este acuerdo permite que el 98% del comercio de los dos países se realice libre de aranceles, pero después de esta negociación, se espera cubrir el 100% de los productos y añadir nuevos capítulos, explicó el viceministro de Comercio Exterior, Diego Caicedo.
El intercambio comercial entre Chile y Ecuador ascendió el año pasado a USD 2 109 millones, un incremento de 8,6% frente al 2017. La modernización del acuerdo incluirá disciplinas de última generación como telecomunicaciones, comercio electrónico, comercio de servicios, género, pequeñas y medianas empresas (pymes), mercado laboral y medioambiente. Desde ayer se instalaron las 11 mesas de trabajo de esta primera ronda de negociaciones que se extenderá hasta el jueves.
La siguiente ronda está prevista para agosto en Santiago, explicó Felipe Lopeandía, director de Asuntos Económicos Bilaterales de Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales de Chile (Direcom). Las autoridades prevén realizar entre tres y cuatro rondas de negociación en total.
La intención es firmar este año el tratado. “Hemos tenido el primer intercambio de propuestas y no hemos advertido temas extremadamente difíciles que se puedan presentar”, dijo Lopeandía, quien, además, es el jefe negociador por Chile en el proceso.
Eduardo Egas, presidente ejecutivo de Corpei, explicó que complementar el acuerdo permitirá que la inversión chilena en el Ecuador se incremente y llegue a nuevas áreas no tradicionales, como la de los servicios y la de tecnología. Según el Ministerio de Producción y Comercio Exterior, las inversiones de Chile en Ecuador sumaron USD 37 millones en el 2018, principalmente en el área minera.
“Chile tiene mucha experiencia, sobre todo en manejo y relacionamiento con las comunidades de las zonas cercanas a la explotación y eso será útil porque Ecuador está empezando en eso”, dice Egas.
El vocero de Corpei, además, considera que existe potencial de mayor intercambio en el sector acuícola, donde se podrían explorar alianzas en áreas complementarias. “Chile es un gran productor de salmón y nosotros, de camarón. Si podemos juntar estos sectores para producir en forma combinada alimentos balanceados, medicamentos y empaques, el comercio crecería mucho más”, apuntó. En cuanto al tema de servicios, Ecuador provee software financiero a Chile, mientras ese país tiene presencia en temas de educación, según muestran los datos de la Federación de Exportadores del Ecuador (Fedexpor).
Para el Gobierno, lograr un acuerdo más completo con Chile es un paso clave en el proceso de adhesión a la Alianza del Pacífico (AP), bloque conformado por Colombia, Perú, México y Chile.
El año pasado, el Régimen presentó su solicitud para ser estado asociado al bloque. Uno de los requisitos es tener tratados comerciales completos con los cuatro miembros de la AP.
Desde entonces, Chile se volvió una prioridad en la agenda de comercio exterior. “Con México es más compleja la negociación porque nuestro acuerdo con ese país es muy pequeño. Tenemos que trabajar mucho en el tema de bienes ”, dijo Caicedo.
Para Patricio Alarcón, presidente del Comité Empresarial Ecuatoriano (CEE), es importante que Ecuador se sume a la Alianza del Pacífico, “porque es un mercado de 250 millones de habitantes y la puerta de entrada a Asia, un mercado clave para Ecuador”. El Presidente de la CEE destaca que Chile podría traer al país inversiones en áreas en donde no hay competencia extranjera, especialmente el de retail y el bancario.