El Colegio de Ingenieros Eléctricos transparenta la problemática que puede generar cortes no programados
El país tiene una demanda promedio de 4.400 megavatios, pero la actual crisis energética que enfrenta el país está haciendo que la principal fuente de generación, las hidroeléctricas, solo provean cerca 3.000 megavatios.
Según el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace), hasta el pasado 10 de noviembre de 2024 el país generó 2.653 megavatios hora. Esos cerca de 1.500 megavatios faltantes, dijo a EXPRESO, Marco Acuña, presidente del Colegio de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos de Pichincha, se explican por el estiaje prolongado, pero también porque el Estado no ha terminado de hacer el mantenimiento a las termoeléctricas que el país posee y porque las contrataciones nuevas de energía anunciadas aún no dan resultado. “No ha existido un manejo técnico adecuado”, señala.
Los niveles de energía que le faltan a Ecuador, dice, son cada vez más preocupantes, pues equivalen a que la mitad del país no tenga energía. “El sector residencial (hogares) más o menos consume un 30 % de energía, el resto es comercial o servicio público. Esa es la realidad que estamos viviendo”, dice.
El déficit, añadió, también se podría comparar con la demanda del sector industrial, que actualmente consume el 35 % de la generación, eso significaría que todas las fábricas, dice, deberían estar parando las 24 del día para compensar lo que hace falta. Esta última medida ya empezó a tomarse con algunas fábricas que operan en la capital.
Los cortes no programados podrían ser inminentes
El pasado fin de semana, el Cenace pidió al Gobierno restringir el 41 % de suministro eléctrico, debido al mal estado de Mazar. Esto hizo que el Ministerio de Energía reprogramara los cortes; desde el domingo, estos se elevaron hasta 12 horas por día.
“Y esto es porque nos hemos consumido prácticamente todas las reservas hidroeléctricas del país, ya no tenemos prácticamente nada en Mazar por eso está paralizada y estamos consumiendo lo de la reserva del embalse de Paute, no nos queda prácticamente ni una reserva considerable”, dice Acuña.
De ahí que el informe del Cenace, en el que se advierte un colapso energético a nivel nacional, no sea tan descabellado. Acuña coincide con el organismo de que la actual situación podría llevarnos a cortes más prolongados o incluso a tener apagones no programados, lo que complicaría aún más la producción de todo un país y la economía.
Un primer contrato con Colombia
La actual situación ha llevado al Gobierno a insistir a Colombia, por la venta de energía. Este 12 de noviembre de 2024, Inés Manzano, ministra de Energía encargada, señaló en un encuentro empresarial que está por firmarse un primer contrato con la empresa privada. Antes de eso, aclaró en sus redes sociales, la Procuraduría ecuatoriana deberá revisar las cláusulas arbitrales.