El Aromo no es única opción para crear Ciudad Alimentaria

El proyecto de la Ciudad Alimentaria no está atado a la disponibilidad de los terrenos de El Aromo, en el cantón manabita de Manta, donde el Gobierno anterior pretendía ejecutar la Refinería del Pacífico.

Lo dice Ricardo Herrera, ejecutivo de la Cámara Ecuatoriana de Industriales y Procesadores Atuneros (Ceipa) y que es parte del grupo Visión, una de las empresas interesadas en este proyecto, presentado semanas atrás por funcionarios del régimen como una opción para ocupar los terrenos que pertenecen a la empresa mixta Refinería del Pacífico, ahora en proceso de liquidación.

En la Ciudad Alimentaria, una suerte de complejo para la industria alimenticia, se pretendería invertir unos $ 1.250 millones en una primera etapa que se ejecutará entre 4 y 6 años, y en la que se prevé la creación de 21.000 empleos.

Herrera señala que sí hay recursos para emprender esta iniciativa privada en cualquier sector de Manabí en el que haya seguridad jurídica. “La perspectiva que ellos (Estado) plantean todavía no está definida; se está hablando de asociaciones públicas-privadas, de concesiones… el cómo será algo que el Estado debería definir y determinar; (pero) no queremos estar atados a la idea de El Aromo, si es así bienvenido, pero le hemos dicho al Estado que estamos en capacidad de poder aterrizar este concepto en otro lugar”, explica Herrera.

Una de esas posibilidades sería unos terrenos en el sector de Manantiales, del cantón Montecristi. Según Herrera, la idea es que el proyecto se levante cerca del puerto de Manta.

El pasado 16 de abril, Yuri Parreño, viceministro de Producción e Industrias, señaló que desde Hidrocarburos se gestiona para que en 60 días se libere el terreno de El Aromo.

El anuncio de este emprendimiento ha generado diversas reacciones. Lucía Fernández, presidenta de la Cámara de Comercio de Manta, destaca la iniciativa de inversión en la región y más aún si se lo pretende hacer en los terrenos de la fallida Refinería del Pacífico, pero tiene algunas dudas.

Por ejemplo, que no se conoce si realmente existirá una inversión estatal; y que el régimen no tiene definido la salida del conflicto legal con la estatal venezolana PDVSA, una de las socias de la Refinería, y otros litigios por terrenos supuestamente asignados para otro proyecto petrolero en la zona.

Agustín Intriago, alcalde electo de Manta, señaló que la idea de Ciudad Alimentaria es interesante para todos en la ciudad y provincia, pues cuenta con un sector productivo que tiene amplia experiencia procesando alimentos.

“Nuestro sector exportador conoce ya los mercados internacionales que demandan alimento permanentemente y debemos aprovechar el gran agro manabita que, lamentablemente, está descuidado justamente por falta de esa coordinación que debe existir entre el sector público y el sector productivo”, declara.

Los grupos Visión e Intergroup son algunos de los interesados en aterrizar este modelo de producción en suelo manabita.

Herrera cuenta que un ejemplo por seguir es el de la ciudad española de Almería, de unos 220 mil habitantes, que bajo este sistema de producción de alimentos factura al año $ 3.600 millones en 30.000 hectáreas.

“Lo que proponemos es arrancar con unas 250 hectáreas para cultivos agrícolas y otras 60 para acuícolas; el objetivo es que la gente conozca las técnicas, entienda la productividad y pueda recibir capacitaciones para generar centros productivos rurales que sean los que nutran a la Ciudad Alimentaria y a muchas otras de este tipo que puedan ir creciendo…”, señala.

DIARIO EL UNIVERSO