De la explotación de Ishpingo se esperan 18 206 barriles al día

El campo petrolero Ish¬pingo, en el extremo sur del bloque 43 ITT (Ishpingo, Tambococha y Tiputini), será el próximo en ser explotado por la estatal Petroamazonas, a cargo de la operación de esta área.

Una parte de este campo se ubica en la zona de amortiguamiento del Parque Nacional Yasuní. Se trata de una franja de territorio que bordea el área intangible de esta reserva, donde está prohibida la actividad petrolera.

En la zona de amortiguamiento no hay restricciones para extraer petróleo, pero la Declaratoria de Interés Nacional del ITT refiere que se deben establecer medidas de protección ambiental.

Antes de iniciar el desarrollo de Ishpingo, Petroamazonas requiere de una licencia ambiental y que se apruebe el presupuesto solicitado.

La emisión de esas licencias se gestionó ante el Ministerio del Ambiente. Estaba previsto que estos permisos se aprobaran en septiembre de este año, pero aún no se han concretado.

Este Diario consultó a esa Cartera sobre el estado del proceso, pero la entidad informó que “al no contar con una máxima autoridad”, no puede entregar información. Humberto Cholango, quien se venía desempeñando como titular de ese Ministerio, renunció la semana anterior al cargo.

Dentro del plan de desarrollo de este campo está previsto construir siete plataformas, en donde se perforarán los pozos petroleros. Se trata de dos estructuras menos de las que se contemplaban en el 2017.

La petrolera estatal informó que se eliminaron estas dos plataformas “por recomendación del Ministerio del Ambiente, para continuar asegurando un desarrollo sustentable y responsable del campo”.

Antes de que se reconfigure el plan para minimizar el impacto ambiental, la última plataforma era la denominada I, y estaba apenas a 6 kilómetros de distancia de la zona intangible del Yasuní. La nueva ubicación de las plataformas petroleras aún no ha sido difundida.

En cada una de estas plataformas está planificado construir varios pozos. Se incluirán unos de alto ángulo, que permitirán llegar a los yacimientos sin generar mayores impactos. “Son técnicas más cuidadosas”, refirió Fernando Santos, exministro de Energía.

Por el momento, no está previsto construir pozos horizontales, que demandan un gran desplazamiento, porque no se cuenta con las condiciones técnicas requeridas en esa área, precisó Petroamazonas.

Otro aspecto que se debe resolver antes del inicio de la explotación de Ishpingo es el presupuesto. Para el desarrollo de esta área y de las otras que conforman el bloque 43 ITT, en el próximo año se requiere de USD 500,6 millones.

Esta cifra fue solicitada al Ministerio de Economía. La Pro forma 2019 está en trámite en la Asamblea Nacional este momento, y Petroamazonas está a la espera de que se apruebe el monto.

La meta inicial de Petroamazonas, cuando se cumplan ambos aspectos (licencias y presupuesto), es que Ishpingo entre en producción en junio próximo. De este campo se espera una producción de 18 206 barriles diarios. En total, el ITT aportará con 114 127 barriles, en el 2019. Es decir, casi el doble de los 64 112 barriles que aporta actualmente, según el reporte de ayer de la Agencia de Regulación y Control Hidrocarburífero (ARCH).

Santos, sin embargo, consideró que el Gobierno deberá evaluar nuevos escenarios, porque Ishpingo se encuentra cerca del área intangible y habrá mayor resistencia de grupos ambientalistas.

El colectivo Yasunidos está en contra del plan para explotar Ishpingo, porque la franja de amortiguamiento protege la zona intangible del Yasuní, donde habitan pueblos en aislamiento voluntario, expresó Antonella Calle, integrante de esta organización.

Cuestionó que se extienda la explotación del ITT sin definir aún cómo se ampliará la zona intangible, aprobaba en la consulta popular de febrero. Y, sin conocer la resolución del informe de auditoría que se hizo al proceso de calificación de firmas de iniciativa popular, que se promovió en el 2014 para impedir la explotación en el bloque 43. Ayer, un grupo de mujeres amazónicas y de Yasunidos se tomó, de manera pacífica, las instalaciones del Ministerio de Energía.

DIARIO EL COMERCIO