La Asociación de Bancos Privados (Asobanca) busca una reunión “lo más pronto posible”, con la Junta de Política y Regulación Monetaria y Financiera para pedir que el cambio en la fórmula de cálculo de intereses en consumos corrientes con tarjetas, se aplique desde el 6 de febrero y no desde el 28 de diciembre del 2018, dijo hoy, lunes 11 de febrero del 2019, Julio José Prado, presidente del gremio.
El 6 de febrero pasado, la Junta derogó la resolución 471, que disponía que cuando el cliente pague la cuota mínima o menos de la deuda total, se le cobren intereses sobre el saldo que dejó de pagar, calculados desde el día en que hizo la compra y no desde la fecha máximo de pago.
Según el Ministerio de Finanzas, los bancos tendrán que hacer un recálculo de los intereses que se generaron en los consumos efectuados con tarjetas de crédito desde el 28 de diciembre de 2018 (día en que entró en vigencia la disposición hoy derogada), hasta el 6 de febrero y devolver la diferencia.
“No estamos de acuerdo con que tengan que reversarse los intereses. Estábamos cubiertos legalmente, haciendo lo que decía la resolución 471. Ninguna ley se puede aplicar de forma retroactiva”, dijo Julio José Prado, presidente de Asobanca.
Según Prado, el gremio tiene en agenda otros tres temas por plantear a la Junta.
El primero, las reformas al Código Monetario para corregir temas relacionados con liquidez bancaria, que no permiten atraer capitales internacionales al sistema bancario.
“Los bancos no pueden movilizar la liquidez en forma adecuada. En el Código hay ciertas normativas relacionadas a reservas mínimas de liquidez y coeficiente de liquidez doméstica, que hacen que toda la liquidez esté depositada en cuentas que no permiten tener flexibilidad a la banca ante una recesión económica, por ejemplo”, explica el vocero.
La Asobanca señala que el segundo tema que la Junta debería revisar es el de la tasa de interés. El gremio propone que las tasas se fijen tomando el cuenta el riesgo de cada cliente; es decir, que en el caso de clientes con buen historial crediticio, la tasa sea más baja; mientras que con aquellos sin historial crediticio o con mal récord crediticio, las tasas sean más altas.
El tercer tema es el relacionado a la revisión de las tarifas que los bancos cobran por sus servicios, dispuesta en la Ley de Reactivación Económica aprobada en el 2017.
Prado afirmó que el gremio todavía está esperando que la Junta dé a conocer su propuesta.
Añadió que el 80% de los servicios bancarios ya tienen tarifa cero y el 12% son tarifas subsidiadas por la banca.
Para incentivar el uso de banca digital, el vocero propone que la revisión a la baja de las tarifas sea principalmente en este tipo de servicios y así desincentivar el uso de efectivo.