Banco del Pacífico alcanzó, al cierre de 2022, una utilidad histórica (antes de provisiones e impuestos) de $ 296 millones, la cifra más alta en 50 años de la historia de la entidad, aseguró la entidad.
Esto supone un crecimiento importante del 66 % con respecto a 2021, tras el fin del proceso de reestructuración de la entidad financiera, señaló a EXPRESO Roberto González, presidente de Banco del Pacífico.
Por ejemplo, dijo González, se realizó un recorte del 32 % de su plantilla laboral, que implicó la salida de 1.200 personas y el cierre de 18 agencias a escala nacional. Todo ello se concretó entre agosto y noviembre de 2021 recalcó.
Ese ajuste en los gastos ha implicado un ahorro en gastos operacionales por $ 84 millones; es decir, $ 230.000 diarios menos en comparación con los años previos a la irrupción del COVID-19.
De este monto obtenido, se han destinado $ 144 millones a nuevas provisiones de cartera, cifra que es 2.2 veces superior al promedio de lo realizado en periodos prepandémicos, lo que le permitirá fortalecer su cobertura y reservas para créditos morosos, actuales o venideros, aseguró la entidad.
En consecuencia, la utilidad neta, luego de la asignación de las provisiones y el cumplimiento del pago de impuestos, alcanzó un valor anual de $ 108 millones, $ 102 millones más frente a 2021, y un patrimonio de $ 914 millones, siendo este el segundo más alto de toda la Banca Privada Ecuatoriana.
Para el 2023, la prioridad seguirá siendo el saneamiento de la cartera crediticia y la mejora en la eficiencia, señaló la entidad.
No obstante, para el año en curso hay una expectativa conservadora de la colocación de crédito y utilidades debido a la situación económica internacional, con altas tasas de interés y temores de recesión, dijo González.
“Va a haber menos crédito para el sector comercial, sector productivo y probablemente pues solo crecerá el sector consumo. Esa es la realidad. Estamos viendo un ejercicio muy conservador, muy táctico para 2023″, explicó el presidente de la entidad.