Bonos podrán utilizarse para pagar créditos en el Biess

Un acuerdo con 12 puntos puso fin a la huelga de hambre que un grupo de maestros jubilados inició en Quito el 23 de julio pasado y que, posteriormente, se replicó en otras ciudades. Con esta medida se buscaba presionar al Gobierno para que pague en efectivo los incentivos pendientes.

El documento fue firmado este 7 de agosto del 2019 en la Asamblea por Alfonso Yánez y Víctor Concha, dirigentes de la Coordinadora Nacional de Maestros Jubilados; el ministro de Economía, Richard Martínez; Vinicio Baquero, viceministro de Gestión Educativa; y Carlos Gómez de la Cruz, subsecretario del Ministerio de Gobierno.

El primer aspecto del compromiso es que los bonos del Estado que se entreguen a los jubilados podrán ser utilizados como medio de pago de préstamos quirografarios e hipotecarios del Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (Biess).

Según el acta, Finanzas coordinará con el Biess para que adquiera los bonos del Estado, destinados exclusivamente al pago de los incentivos a los jubilados, con el fin de ofrecer por ellos un castigo menor en el mercado bursátil.

El Directorio del banco aprobó que la entidad destine hasta USD 240 millones a la compra de estos títulos. Las tasas de descuento que ofrece van desde el 1,07% hasta el 6,25%.

Para los jubilados priorizados (mayores de 70 años, con enfermedades catastróficas o con discapacidad) se harán pagos fraccionados. Entre agosto y noviembre recibirán mensualmente un 25% de su compensación. Esto representará un desembolso de USD 3,8 millones.

A los jubilados obligatorios y priorizados de los años 2008, 2009 y 2010, y que son beneficiarios de la Ley Interpretativa, Finanzas pagará en efectivo USD 2 000 mensuales de octubre a diciembre de este año. Este grupo comprende a los exfuncionarios que recibieron, en el pasado, solo pagos parciales de sus beneficios.

El resto del monto pendiente se pagará en 2020, según el cronograma que permita la disponibilidad presupuestaria.

Para quienes se jubilaron en esos años, pero no son considerados priorizados, se determinó que hasta el 30 de agosto el Ministerio de Educación entregará a la Cartera de Finanzas los expedientes de los extrabajadores. La validación de esas carpetas se hará hasta el 30 de septiembre. Por último, el 15 de octubre deberá estar lista la cuantificación del impacto presupuestario.

Martínez comentó que el acuerdo suscrito se sustenta en función de las restricciones presupuestarias que tiene el Estado y los mecanismos consensuados con los extrabajadores.

Los maestros que se instalaron afuera de la Asamblea hace 17 días lo hicieron con el propósito de que sus compensaciones sean pagadas completamente en efectivo y rechazaban rotundamente los bonos, asegurando que saldrían perjudicados en el momento de negociarlos en la bolsa.

Dirigentes de los jubilados mantuvieron reuniones casi a diario, hasta altas horas de la noche, con representantes del Gobierno y algunos asambleístas que intervinieron como mediadores. Hubo acuerdos fallidos y desencuentros. Los jubilados afirmaron que no levantarían la medida sin un documento firmado en el que se recoja sus demandas.

Una alternativa que en su momento pusieron sobre la mesa las autoridades fue crear, a través de una reforma tributaria, un aporte especial para que la ciudadanía abone al pago de los incentivos, mediante un mecanismo similar a las contribuciones temporales por el terremoto de 2016. Pero fue rechazada tanto por jubilados como por legisladores.

En el transcurso de los días los jubilados dieron paso a la propuesta de recibir bonos, con la condición de que el Biess participe como un comprador y, así, evitar un fuerte castigo en los papeles.

“Hemos venido luchando porque se pague, en efectivo, a todos mis compañeros desde el 2008 hasta el 2019. Por eso, nosotros planteamos que la vía en este momento era dirigirnos a nuestro banco, el Biess”, dijo Yánez a sus compañeros en un auditorio de la Asamblea, en referencia a los bonos estatales.

Finanzas empezó a emitir los papeles el 31 de julio pasado. Están dirigidos a quienes se retiraron de la función pública antes de cumplir 70 años de edad. Hasta el momento 651 bonos ya han sido pagados.

DIARIO EL COMERCIO