China concentra el 42% de las ventas de camarón en el 2019

Diez países concentran el 96% de las exportaciones de camarón ecuatoriano. China se ubica como el principal mercado, por encima de Vietnam y Estados Unidos en los primeros cinco meses del 2019, según los datos de la Cámara Nacional de Acuacultura (CNA).

La demanda china tuvo un crecimiento de 220% en libras entre enero y mayo de este año, en relación al mismo período del 2018.

En tanto, la facturación aumentó 181% en el mismo tiempo y pasó de USD 214,1 millones a USD 601 millones. El 2018 en ese periodo Vietnam estaba en primer lugar. José Antonio Camposano, presidente de la CNA, calcula que este año las ventas a ese país cerrarán con alrededor de USD 1 400 millones.

“Es decir que seremos el principal producto de exportación a China”. Ese mercado es el motor de crecimiento del sector camaronero. Hoy demanda el 42% de la producción local, cuando hace siete años solo era el 2%. Por eso, una de las preocupaciones es el 2% de arancel que se paga para entrar a ese país.

“Es necesario que la agenda comercial del Ecuador mire hacia allá”. Camposano espera que el nuevo ministro de Comercio Exterior, Iván Ontaneda, retome con más agresividad la agenda con Asia.

Además de China está Corea del Sur, un destino al que se podría exportar más de USD 180 millones, pero no se vende ni la mitad, según la CNA, porque hay trabas fitosanitarias y se paga un arancel del 20%.

Las ventas totales de camarón hasta mayo del 2019 sumaron 554,7 millones de libras, que equivalen a USD 1 450,5 millones, un crecimiento de 23% y 9% respectivamente, en relación con igual período del 2018. Con ese ritmo, el sector estima que este año las exportaciones alcanzarán 1 400 millones de libras, que significarán USD 3 500 millones.

Este año los precios en el mercado externo siguen a la baja, pero la caída es menos agresiva y hay mayor estabilidad que el 2018. En marzo pasado el precio promedio de la libra se ubicó en USD 2,62 y en mayo fue de USD 2,54.

Pero en el mercado interno esa caída afecta los márgenes del productor, que recibe precios inferiores. Segundo Calderón, presidente de la Cámara de Productores de Camarón de El Oro, señala que actualmente reciben entre USD 1,80 a 1,85 por cada libra.

Además, hay una reducción de USD 0,50 en el costo final porque el mal estado de las vías aumenta el tiempo de viaje -de tres hasta cinco horas- para llegar a las empacadoras en Guayaquil y el producto se daña.

La Cámara de El Oro agrupa a 160 productores entre pequeños y medianos, de hasta 150 hectáreas y está en formación una Federación Nacional para asociar a camaroneros de Santa Elena y Manabí.

La agenda es insistir en la reducción de los costos de producción, insumos, alimentación y otros. El costo de producción para un pequeño y mediano camaronero por hectárea oscila entre USD 7 000 y 10 000.

Según Calderón, el ‘boom’ de las exportaciones de camarón hizo que crecieran las áreas sembradas en el país “sin ningún control”.

Hace dos años existían 140 000 ha repartidas en las provincias de Guayas, El Oro, Manabí y Esmeraldas.

Actualmente alcanzan las 240 000 ha. “Lo que ha ocasionado una competencia desleal en el mercado interno”, añade el dirigente de El Oro.

Explicó que el aumento en la producción tiene que ver con la cantidad de hectáreas sembradas, pero no con un mejor rendimiento en las piscinas.

Más bien hay una reducción en la densidad de siembra. Pasaron de 4 000 y 5 000 libras por ha a 2 000 y 2 500 por ha. Según Calderón, “los productores bajaron” para no perder mercado entre las plantas empacadoras.

Álex Elghoul, gerente general de Aquatropical y director de la Cámara de Acuacultura de Santa Elena, explicó que muchas zonas arroceras de Chone, Yaguachi y Palestina ya están empezando a producir camarón de manera intensiva.

Estas áreas, a diferencia de otras en el país, son altamente tecnificadas, ya que producen cerca de un 30% más que los cultivos tradicionales.

En los últimos cinco años las inversiones se concentraron en optimizar protocolos para instalar software para cosecha y alimentación automática, ajuste de tablas de nutrición del camarón y buena genética de la larva. Elghoul explicó que en 100 días se obtiene un camarón de 30 a 35 gramos en la actualidad, cuando antes era solo 12 gramos.

El promedio de sobrevivencia de la larva mejoró en casi un 80%; hace 10 años se alcanzaba un 60%. Todo esto da como resultado un crustáceo más robusto y resistente. 

DIARIO EL COMERCIO