Incluir todas las obligaciones en deuda, otro hito con Fondo Monetario Internacional

Ecuador continúa cumpliendo una serie de compromisos que tiene con el Fondo Monetario Internacional (FMI), tras haber aprobado la primera revisión técnica hace poco más de una semana. Aunque el 30 de mayo se anunció dicha aprobación por parte del equipo técnico del Fondo, recién el próximo 26 de junio está prevista la reunión del Directorio Ejecutivo de este organismo, en el cual se ratificará dicha aprobación, y se dará luz verde para el siguiente desembolso de unos $ 250 millones para el país.

Así, como parte del compromiso de transparentar las cifras, el viernes pasado, el Gobierno anunció la nueva metodología de cálculo de la deuda, en la cual el total asciende a $ 55.605 millones, es decir, un 49,17% PIB.

En el nuevo boletín se incorpora una serie de obligaciones que antes no se contabilizaban como deuda. Por ejemplo, en un rubro adicional que se denomina Cuentas por pagar, se han incluido las preventas petroleras con ChinaTailandia Omán y la deuda por pasivos intangibles con la petrolera Schlumberger. En el boletín se puede observar que el total de financiamiento contratado por preventas ha sido de $ 10.500 millones, pero ya se han pagado $ 9.970,8 millones, por lo que el saldo aún es de $ 284,1 millones. Asimismo se incluyen los Derechos Especiales de Giro, que entregó el FMI como parte del financiamiento por el terremoto. En la deuda interna, en cambio, se contabilizan los atrasos con proveedores, denominada deuda flotante, que según el cálculo del Gobierno estarían en el orden de $ 1.781 millones hasta abril de este año.

Para Alberto Acosta Burneo, es positivo y necesario haber transparentado el monto total de deuda. Tener una contabilidad integral ayuda a la administración pública a tomar decisiones bien informadas, comentó. Esto, sobre todo, luego de que el Gobierno anterior creó una serie de figuras “creativas”, que si bien eran obligaciones no se incluían en la contabilidad. Por ejemplo, dijo, el pasivo intangible que se contrajo con Schlumberger por $ 1.000 millones fue un mecanismo para ocultar lo que al final del día era una deuda. Para Acosta, la deuda que más importa es la agregada, justamente porque en ella se ve reflejada la necesidad total de recursos del fisco para cumplir con sus obligaciones.

Jaime Carrera, secretario ejecutivo del Observatorio de la Política Fiscal, consideró que el panorama más claro de la deuda deja ver el importante esfuerzo que debe hacer el Gobierno en los próximos años, para regresar a niveles del 40% en la relación deuda-PIB. Es que, de acuerdo a la Carta de Intención, la idea es que Ecuador retorne al 40% que era el techo de deuda legal (ahora eliminado por ley) hacia el 2023. Para Carrera, el monto de atrasos reportado es alto, pero incluso podría ser mayor.

Adicionalmente a la deuda, el Ecuador debe cumplir una serie de metas, especialmente aprobar ciertas leyes en el tema de finanzas públicas, anticorrupción, del régimen monetario y financiero, así como tributario, a través de la Asamblea.

Aunque en la Carta de Intención del FMI se ha establecido la mayor parte de los compromisos para 2019, se esperaba que la reforma laboral se hiciera en 2020, pero el Gobierno ya ha hablado de adelantarla para este mismo año. La revisión de subsidios es otra meta calculada para el 2021.

Riesgo país se reduce, pero siguen variaciones

La baja del riesgo país de Ecuador, que en enero se colocaba en 826 puntos y que el 7 de junio cerró en 592 puntos, ha sido mencionada por el Gobierno como un logro tras la firma del Acuerdo con el FMI. Sin embargo, ese índice (que mide el grado de confianza de los mercados en el país con sus obligaciones externas) se mantiene oscilante. El 3 de junio pasado estuvo en los 639 puntos, mientras que el 23 de abril se colocó en 512.

ara Vicente Albornoz, analista económico, es importante comparar este comportamiento con el de otros países. Argentina mantiene las mismas variaciones, pero con índices mucho más altos: el 7 de junio tuvo un riesgo de 947 puntos, mientras que el 3 de junio se colocó por encima de la barrera de los 1.000 puntos (1.008).

Para Jaime Carrera, el riesgo país no ha bajado lo suficiente. Esto porque, a su parecer, el Acuerdo con el FMI no ha sido suficiente para generar la confianza necesaria en los mercados. Deberán pasar varios años de conducta estable del país para recuperar confianza, comentó el analista.

 DIARIO EL UNIVERSO