El Central traza estrategia para ampliar el acceso a los servicios bancarios

El 50% de los ecuatorianos tiene una cuenta bancaria. De este porcentaje, apenas la mitad utiliza una tarjeta de crédito. Ese panorama motiva al Banco Central del Ecuador (BCE) a preparar una política de inclusión financiera, hasta ahora ausente en el país.

El Banco Mundial (BM) acompañará este proceso que involucra a todas las partes del sistema financiero de Ecuador. La estrategia tiene el objetivo de fortalecer el marco regulatorio existente, la supervisión del sistema cooperativo y microfinanciero.

Verónica Artola, gerente del BCE, explicó que el primer paso será generar información estadística para posteriormente formular políticas públicas. También se analiza la creación de un fondo de garantía “para préstamos que podrían no ser atractivos para las instituciones financieras”.

El BM ha acompañado previamente a 30 países en procesos similares. Rafael Pardo, especialista financiero del organismo, explicó que su trabajo se centra en coordinar consensos entre las partes, facilitar el uso de tecnologías, extender las actividades bancarias mediante agentes y corresponsales, entre otras.

“La inclusión financiera empodera a los individuos, les otorga independencia y reduce la violencia familiar a medida que el individuo adquiere mayor control financiero”, acotó Pardo.

Los servicios financieros permiten -además- ahorrar, invertir y acceder a créditos para crear pequeños negocios con potencial de crecimiento, agregó Valeria Llerena, directora de la Red de Instituciones Financieras de Desarrollo. La política también contempla la creación de un índice de inclusión financiera que refleje la realidad del país. Llerena dijo previamente a este diario que el índice estará listo dentro de un año, aproximadamente.

Las mujeres son también prioritarias dentro de la política pública. Según el Global Findex 2017, solo el 10% de este segmento tiene acceso a productos de ahorro, y únicamente 11 de cada 100 acceden a un crédito.

DIARIO EL TELÉGRAFO