En el 2018, el Gobierno redujo el déficit fiscal a USD 3 352 millones; esto es el 3,06% del Producto Interno Bruto (PIB), de acuerdo con los datos devengados del Presupuesto.
El déficit se genera cuando los
gastos son mayores que los ingresos. Esta brecha fue menor a la que se
había planteado en agosto pasado el Fisco y que era del 4,1%, según
consta en el Plan Prosperidad.
También es inferior a la cifra del 2017, que terminó en USD 5 838 millones.
Dos factores explican la reducción de la brecha fiscal. Primero, el recorte en
gastos para inversión estatal. La obra pública fue el rubro que más
redujo el Gobierno durante el año pasado, el cual cayó en USD 1 796 millones
frente al registrado en el 2017.
Las limitaciones de financiamiento que atravesó el país este año
obligaron al Gobierno a recortar el gasto, pero no fue suficiente, explica Guillermo
Granja, docente de economía de la Universidad Ecotec.
Según Granja, el ajuste al gasto pudo ser mayor en los egresos corrientes;
es decir, en sueldos, mantenimiento del Estado, intereses de la deuda y
otros, que se incrementaron en relación con el 2017.
“No lo han hecho por el costo político quizás, pero no hacerlo a larga impacta
en la economía, porque el país seguirá requiriendo endeudarse más”, señala el
docente.
De acuerdo con el Presupuesto, inicialmente se esperaban USD 8 253
millones de financiamiento público, pero se recibieron 7 279,5 millones.
El préstamo de USD 900 millones que el Gobierno esperaba hasta finales
del 2018 del banco chino CBC, para el plan anual de inversiones, no
llegó.
El segundo factor que explica la reducción del déficit son los atrasos en los
pagos que tenía que hacer el Estado y que suman USD 1 350 millones,
según la ejecución presupuestaria.
La mayor parte corresponde a pagos pendientes por bienes y servicios de consumo
para el mantenimiento del Estado (arriendos, servicios básicos, etc.).
Les siguen las transferencias a gobiernos locales.
Los gastos en sueldos y en intereses subieron
De los USD 28 067,46 millones que gastó Gobierno durante el año pasado, el
monto más grande; esto es, el 73%,corresponde al gasto corriente.
Este tipo de egresos creció en USD 2 502 millones en relación al 2017, aunque
el Gobierno emprendió un proceso de optimización del tamaño del Estado, con
fusión y eliminación de entes, además de reducción de salarios para
funcionarios del nivel jerárquico superior, entre otras medidas.
Dentro de este grupo, los pagos al personal y el pago de intereses de la deuda
tuvieron los incrementos más importantes.
En el 2018 se pagaron USD 311 millones más en sueldos que en el 2017 y USD 511
millones más en intereses de deuda en el mismo período de comparación.
La inversión pública registró el mayor recorte
Dentro del gasto de inversión y de capital, aquel destinado a
obra pública fue el que más se ajustó durante el año pasado.
En el 2017, el Gobierno destinó USD 1 451,8 millones a obras públicas, pero en
el 2018, la cifra se redujo a USD 512 millones; esto es, una caída de 64%.
Según Fausto Ortiz, exministro de Finanzas, una parte de la reducción
que se evidencia en la cifra de gasto de inversión y de capital obedece a que
Finanzas recibió solo hasta noviembre las facturas de los proveedores, por lo
que la cifra se podría modificar.
Ortiz añade que el recorte en este tipo de egresos fue el factor principal que
ayudó a alcanzar la meta de déficit, pero señala que mermar la inversión tiene
un efecto de enfriamiento de la economía.
La remisión impulsó los ingresos por impuestos
Al culminar el 2018, el Gobierno recibió ingresos por USD 15 227 millones en
impuestos, una cifra mayor a los 13 977 millones logrados en el 2017.
La directora del Servicio de Rentas Internas (SRI), Marisol Andrade,
señaló hace unas semanas que la recaudación prevista para cerrar el 2018 era de
unos USD 14 400 millones; es decir, 9% superior a la del 2017 que fue de USD 13
223 millones. La entidad ajusto su meta a mediados de año.
Los ingresos tributarios del año pasado tuvieron un impulso gracias la
recaudación de la remisión tributaria, que empezó en agosto. Con esta medida,
el Gobierno estimó ingresos por USD 602 millones en el 2018, pero la cifra se
duplicó y cerró en unos USD 1 250 millones, según el SRI.
El precio del petróleo fue mayor al esperado
Los ingresos por venta de petróleo superaron en USD 437 millones los
registrados en el 2017. Esto, debido a que en la Pro forma aprobada para el
2018 el Fisco estimaba que el precio del barril de crudo promediaría los USD
41,92; sin embargo, de acuerdo con datos del Banco Central del Ecuador (BCE),
entre enero y octubre el barril se vendió en USD 62,49 en promedio. Los buenos
precios ayudaron a paliar la caída de la producción estatal, la cual alcanzó
los 121,7 millones de barriles hasta octubre, un 5% menos que en los primeros
diez meses del 2017.
Para 2019, Finanzas fue más optimista que en 2018 y espera USD 50,5 por barril.
Aunque al inicio estimó en USD 58 el barril, decidió ajustar a la baja el monto
debido a la caída de precios desde finales del año pasado.